Visitar las Cinque Terre

Cómo visitar Cinque Terre, turismo lento y respetuoso con el territorio

Llegar a Cinque Terre es una experiencia única, tan importante como la misma estancia, significa atravesar uno de los territorios más bellos del planeta y extremadamente rico en términos naturalistas. La Liguria de Levante es famosa por sus paisajes que han inspirado a generaciones de escritores, poetas y pintores. Esta guía pretende proporcionar indicaciones sencillas, ayudar a quien desea llevarse a casa un recuerdo indeleble de su viaje.

Las Cinque Terre (Riomaggiore, Manarola, Corniglia, Vernazza y Monterosso) son uno de los destinos turísticos más populares de Liguria, famosas por sus impresionantes paisajes, rutas de senderismo, paisajes en terrazas y pueblos coloridos retratados por maestros como Telemaco Signorini.

Para llegar a las Cinque Terre hay varias posibilidades, cada una con sus propias ventajas y desventajas, nuestro deseo es proporcionarte una lista exhaustiva:


Bicicleta, para los amantes del deporte

Los recorridos son tan desafiantes como satisfactorios y conocen desniveles considerables, de más del 16%, así como de varios centenares de metros, si se quiere hacer una parada en los pueblos.
Por esta razón, una de las opciones más comunes es tomar la carretera escénica (en excelentes condiciones), aunque, en algunas ocasiones, puede estar muy transitada. Podrás disfrutar así de las Cinque Terre desde lo alto, atravesando bosques, terrazas y encontrando antiguas parroquias.
Hipótesis: partir de La Spezia y llegar a Biassa (también en transporte público) y desde allí continuar hasta Levanto siguiendo la carretera panorámica. Son 35 kilómetros en los que se consigue contener el desnivel, hasta el descenso final que llega al pueblo.
Desde allí, puedes tomar el carril bici que, siguiendo la ruta abandonada del ferrocarril del siglo XIX, llega a Bonassola y Framura (dos lugares espléndidos y más aislados que las Cinque Terre); el camino tiene algunos puntos protegidos del sol y que permiten refrescarse: los túneles excavados en la roca y numerosas vistas al mar.
Una vez que llegas a tu destino, tienes dos opciones. Puedes regresar a la capital en tren, o bien, recorriendo el carril bici hacia atrás hasta tu etapa inicial (Levanto) y embarcarte.
De hecho, hay un servicio de navegación activo que, a lo largo de las Cinque Terre y Portovenere, conduce a La Spezia. Esta opción te dará la oportunidad de ver las Cinque Terre desde una perspectiva privilegiada, la del mar. Podrás relajarte mientras el ferry te lleva de regreso a La Spezia y la brisa marina te tonifica.
El servicio de navegación, de hecho, da la posibilidad a los pasajeros que se dotan de billete, de transportar consigo su bicicleta.


En coche, ¿estás seguro de que quieres hacerlo?

Visitar las Cinque Terre y las zonas limítrofes también se puede hacer en coche, pero la posibilidad de encontrar estacionamiento es reducida, en todas las épocas del año, excepto en invierno. Los estacionamientos disponibles son de pago y su número es muy limitado. Sugerimos esta opción solo a aquellos que deseen explorar las áreas interiores, como Val di Vara, siguiendo un itinerario en altura, que privilegie las zonas salvajes y menos frecuentadas.
Sin embargo, siguiendo la carretera panorámica (por ejemplo, a partir de La Spezia), es posible disfrutar del paisaje de las Cinque Terre desde arriba, puestas de sol inolvidables sobre un mar brillante. Manteniéndote lejos de los lugares más frecuentados y, en temporada alta, llenos de turistas podrás visitar lugares como Groppo y Volastra, por encima de Riomaggiore; o San Bernardino, además de numerosos santuarios inmersos en la vegetación mediterránea, en los olivares, entre los viñedos: Nuestra Señora de Soviore, Nuestra Señora de Reggio y Nuestra Señora de Montenero. En este caso, una vista impresionante está garantizada, así como la tranquilidad acompañada solo por el canto de las cigarras.


Tren, la elección clásica – pros y contras

El tren es la opción más común para aquellos que desean visitar las Cinque Terre y llegar a Levanto. Hay decenas de viajes al día que salen de la Estación Central de La Spezia. Las localidades ribereñas son servidas por la línea decimonónica que ofrece repentinos escorzos sobre acantilados salvajes entre una galería y otra.
Sin embargo, al ser el medio de transporte más utilizado, tiende a estar superpoblado, especialmente en verano, con las molestias que esto puede implicar. Puede suceder, por ejemplo, que tengas que pasar el viaje de pie, al no tener asientos reservados. El transporte, debido a la multitud y al hecho de que gran parte del tráfico está bajo tierra, puede ser un poco abrumador, además del hecho de que usar Internet desde nuestros teléfonos inteligentes es difícil debido a la ausencia de campo en los túneles.
Es cierto que la economía y la velocidad son incomparables, pero para llegar a la costa, en algunos casos será necesario descender por los caruggi (característicos y estrechos callejones de la riviera ligur) y desenredarse entre la multitud presente en la estación casi a cada hora; además, el límite de las barreras arquitectónicas no siempre es superable.
A pesar de ello, para aquellos que decidan utilizar el tren, la sugerencia es elegir, entre los servicios de la red nacional de ferrocarriles "Ferrovie dello Stato" la compra de las Cinque Terre Card/Tren que, además de incluir la posibilidad de moverse, en segunda clase (solo en trenes regionales y regionales rápidos, excluyendo los trenes IC/ICN/FB), sin límites entre La Spezia, Levanto y Cinque Terre, da acceso a aquellos senderos que, a excepción del invierno, tendrían un costo (el de Monterosso a Vernazza y de Vernazza a Corniglia). Además, con este billete es posible utilizar los autobuses lanzadera que sirven el Parque.
Comprar la Cinque Terre Card/Tren es simple: se puede hacer en las estaciones de tren o en los puntos de información turística presentes en el territorio o en el sitio web de Trenitalia (https://www.trenitalia.com/it/treni_regionali/liguria/viaggiare_nelle_5terre.html).


A pie, para los que quieren seguir las huellas de la historia

Al mirarlo desde lo alto, este territorio aparece como una urdimbre de senderos, la mayoría de los cuales se pueden recorrer de forma gratuita.
Las excepciones, en verano, son las que conectan Monterosso con Vernazza y Vernazza con Corniglia, en ambos sentidos.
Desde el interior se puede llegar a todas las localidades de las Cinque Terre. Por ejemplo, es muy sugestivo el sendero que desde Casella alcanza el ápice de los montes que se encuentran detrás de Manarola y San Bernardino.
Algunos siguen el sinuoso sendero que desde Portovenere (accesible en barco) sube hasta el Muzzerone y luego, desde allí, al Colle del Telegrafo. Un sendero bastante exigente, especialmente si hace calor, pero que compensa con una vista única entre antiguas canteras abandonadas de Portoro y paredes muy apreciadas por los escaladores.
Se trata del AV5T, (Alta Via delle Cinque Terre) – el sendero desde el que se puede llegar a todas las localidades. También se puede tomar desde la localidad de Biassa, fracción de La Spezia. Esto permitiría evitar gran parte de la intensa subida y disfrutar de un largo paseo entre bosques y paisajes en terrazas con un desnivel relativamente bajo.
El AV5T completo tomaría más de veinte horas, unos 60 km de largo, pero siempre es posible dejar la cima de las montañas y llegar a los pueblos de la costa como: Monterosso, Vernazza, Corniglia, Manarola y Riomaggiore. Puedes permanecer en altura hasta que hayas llegado a las cercanías de la ciudad que deseas visitar.
Con la excepción de Corniglia, cada una de las Cinque Terre es servida por barcos (siempre puedes comprar tu billete antes de subir a bordo), por lo que, después de un intenso día de excursiones, puedes regresar a tu alojamiento disfrutando, desde la cubierta, la brisa del mar y el sol color ámbar que precede al atardecer.
Alternativa: en pocas horas, tal vez saliendo por la mañana alrededor de las 8:00, llegar a Riomaggiore. De Spezia a Biassa en autobús y así proceder, ahorrando fuerzas, enganchando el sendero hacia Riomaggiore. En Riomaggiore puedes comprar un billete de un día que te permite hacer una parada en cada una de las Cinque Terre. Por ejemplo, Monterosso y, desde aquí, puedes llegar por el sendero (de pago en verano) Vernazza.
Caminando por los senderos que llegan a las Cinque Terre es posible divisar las huellas prehistóricas y líticas de los antiguos ligures: el menhir partido del Monte Capri y el menhir – Masso Diavolo.


Autocaravanas y furgonetas, la movilidad – aventurera – del momento

Moverse con una furgoneta o una autocaravana puede ser una buena solución para explorar el territorio de las Cinque Terre y sus alrededores. En la zona hay algunas áreas equipadas disponibles para los viajeros que eligen moverse de esta manera.
Sin embargo, no todos son accesibles en todo momento del año, mientras que otros, en temporada alta, pueden ser económicamente exigentes.
Estas son las localidades en las que hay una o más áreas de descanso adaptadas a tus necesidades: La Spezia, Monterosso, Levanto, Deiva Marina. Algunas ponen a disposición electricidad y están video-vigiladas, otras no gozan de particulares comodidades y responden a un mayor deseo de aventura.
Cualquiera que sea el área que elijas, es importante considerar cómo se conecta con la ciudad más cercana gracias al transporte público. De hecho, podrías encontrar algunas dificultades para moverte por la noche, con la oscuridad, debido al número reducido de viajes en autobús o su ausencia total.
Otro aspecto que no debe subestimarse es poder llegar a los destinos turísticos y paisajes que te interesan con la máxima sencillez, evitando tiempos muertos y largas esperas causadas por posibles conexiones.
Entre los lugares de interés que caracterizan el territorio de La Spezia se encuentra, sin duda, la Isla Palmaria. Puedes llegar a ella con numerosos ferries y ofrece oportunidades de senderismo únicas. Portovenere es un lugar maravilloso, con su complejo religioso aferrado a la roca y la sugerente cueva de Byron. Señalamos a los turistas que se puede llegar a Portovenere en coche, autobús, a través de la red de senderos o en barco. El pueblo no es servido por la línea de ferrocarril.
Aún más: puedes alcanzar a las Cinque Terre; Levanto, Deiva y Moneglia con el tren o también con un eficiente servicio de navegación que permite gozar de una experiencia única en términos de paisaje: observar la Riviera de Levante desde la cubierta de una de las numerosas embarcaciones. De esta manera podrás disfrutar de la brisa del mar, el sol y la belleza natural del Parque de la UNESCO resumida en la visión de su costa, una costa única en el mundo.


Con el barco o con tu propia barca, las Cinque Terre al alcance del mar

Las Cinque Terre están al alcance del mar. Los pueblos se han desarrollado mirando hacia el horizonte, mientras que los habitantes han transformado, con una actividad prolongada durante siglos, las escarpadas crestas rocosas, que se encuentran detrás de la ciudad, en paisajes en terrazas. Jardines colgantes donde cultivar vides, olivos y hortalizas y en cuyo ápice se encuentra el bosque o extensiones de retama, enebro y mirto.
Si sigues la costa navegando puedes disfrutar plenamente de un paisaje similar, de sus singularidades: ver que cada uno de los países se acerca a nosotros y se enriquece con detalles. Durante los últimos trescientos años, este mar, estas casas de colores que crecen en altura han atraído a pintores de todo el mundo. Tenemos ante nuestros ojos su paleta, repleta de matices que van del turquesa, al verde, al ocre y al rojo ladrillo.
Hoy en día es posible navegar disfrutando de todas las comodidades, incluyendo un excelente Wi-Fi (algo de lo que el tren carece) sin renunciar al hecho de llevar a casa imágenes que de otro modo serían inaccesibles: la roca de Ferale, las Rojas, las Negras y, en general, tener una visión general de Portovenere y Palmaria, así como el Golfo de los Poetas; por lo tanto, Riomaggiore, Manarola, Corniglia, Vernazza y Monterosso, así como de Levanto, Deiva y Moneglia. Además, podrás contemplar los numerosos pueblos que están más lejos de la costa, hacia la cima de las montañas.
Utilizar los servicios de navegación nos permite seguir la ruta que, en un tiempo, estaba surcada por los leudi (barcos de carga típicos de la Riviera Ligur) que, precisamente en las Cinque Terre, recogían su carga de aceite y vino para conducirla a los mercados de Génova o de la Toscana.
Navegar por las Cinque Terre, sobre todo en verano, cuando las condiciones del mar son las mejores, añade tesoros inestimables a la memoria del viajero y le ahorra un viaje, quizás más rápido, pero que no ofrece la misma variedad de panorama: un porcentaje considerable del tiempo de viaje de quien se desplaza en tren, de hecho, está en la oscuridad de los túneles, aislados del mundo circundante.

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